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07/12/2017
El precio de la luz ha vuelto a subir en noviembre, un hecho que provoca que muchas familias recurran a soluciones creativas e ingeniosas para salir del paso a la hora de cocinar. ¿Cómo ahorrar energía mientras se cocina? ¿Cómo sacar el máximo provecho de nuestros electrodomésticos convirtiéndolos en multifunción?
Tiempo de lectura: 3 minutos
Ahorrar cocinando
Trucos los hay miles, pero con estos cinco consejos ahorrarás energía sin darte apenas cuenta:
Ideado por la bloguera y experta culinaria Lisa Casali, este método consiste en utilizar objetos herméticos con comida en su interior e introducirlos en el lavavajillas junto con nuestra vajilla lista para lavar. De esta manera, aprovechamos el calor generado durante el lavado para cocinar nuestros alimentos.
Esta premisa ha ido calando poco a poco en los hogares y actualmente se ha transportado a las cafeteras e incluso hasta las lavadoras. El concepto es el mismo: servirse del calor generado por el electrodoméstico para aprovechar y cocinar los alimentos.
Entre las ventajas de esta técnica se encuentra que evitas malos olores y ahorras el gasto generado por el horno o la vitrocerámica.
Sin embargo, a la hora de ponerla en práctica hay que tener cuidado y utilizar envases totalmente herméticos, ya que existen bacterias que sobreviven a las temperaturas de estos electrodomésticos.
Comprar dos bandejas de más para nuestro horno nos capacita para poder cocinar varios alimentos a la vez. Aprovechar cuando cocines una pizza y añadir un bizcocho en otra bandeja o incluso un plato que te llevarás al trabajo al día siguiente pueden ser algunas de las soluciones que te permite esta técnica.
De esta manera evitarás un consumo excesivo de electricidad con el horno y estarás ahorrando tiempo a la vez que energía. Recuerda también no abusar del precalentamiento, sobre todo si vas a tenerlo en funcionamiento durante mucho tiempo.
Puedes probar este sistema con alguna de estas recetas cuyo nombre está relacionado con la economía.
Cuando vayas a cocer un alimento, aprovecha para cocer varios a la vez. Puedes cocer pasta junto con brócoli, ya sea para consumirlos en el acto o guardarlos por separado para más adelante. Si cueces arroz, echa guisantes o huevos en el mismo recipiente y aprovecha para cocinar varios de los alimentos.
La olla exprés supera en ahorro de tiempo y gasto energético.
El microondas es el gran olvidado. Lo relegamos a la tarea de calentar leche y derivados, cuando muchas de las funciones que realiza el horno son orquestadas por el microondas a la perfección. Aprovecha este electrodoméstico y sácale el mayor rendimiento que se te ocurra.
Calentar tus alimentos al mismo tiempo que el café o introducir un vaso de agua junto a tu trozo de pizza evitará que ésta acabe convertida en chicle, a la vez que calentarás agua para tomarte un té o infusión.
Cuando cocinamos durante mucho tiempo, además de la potencia que hemos establecido en nuestra vitrocerámica, estamos generando ya de por sí un calor residual. Puedes aprovechar esta temperatura apagando la vitro un tiempo antes de terminar de cocinar el alimento.
Así, puedes ahorrar hasta un 20% de energía y el calor final te es más que suficiente para finalizar la cocción. Por otro lado, te conviene saber que una vez llegados al punto de ebullición, no te hace falta mantener una alta potencia en tu vitrocerámica y puedes reducirla, ahorrando energía, mientras sigues cocinando.
Como ves, existen multitud de ideas para ahorrar energía cocinando. Prueba alguna de ellas y quizá acabas convirtiéndote en un seguidor de esta forma de ahorrar tiempo a la vez que reduces tu factura de la luz.
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